La principal diferencia entre un agente inmobiliario y un master broker radica en su nivel de responsabilidad y alcance de funciones. Un agente inmobiliario se encarga de ayudar a clientes en la compra, venta o alquiler de propiedades específicas, actuando como intermediario en transacciones individuales. Por otro lado, un master broker supervisa a varios agentes o brokers en proyectos inmobiliarios de gran envergadura, como desarrollos residenciales o comerciales.
Su rol incluye la planificación de estrategias de ventas, marketing y coordinación de equipos para garantizar el éxito global del proyecto. El master broker suele gestionar operaciones a nivel macro, con mayor enfoque en proyectos complejos.